Lo que has de saber sobre la plusia y cómo prevenirla

plusia

La Plusia es un insecto migratorio de la familia de los heteróceros, que proviene del norte de África y de Asia central, extendiéndose por muchas partes de Europa, y también por la Península Ibérica.

Estas mariposas tienen un color marrón oscuro en su aspecto exterior y otro tono más claro en su parte interior. Sus alas ofrecen una tonalidad naranja y rojiza. Con un tamaño medio entre 3 y 4 cm, sus manchas de color plateado las diferencian de otros insectos similares.

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¿Cómo actúan sobre la plantación?

En su estado larvario, la Plusia va mordisqueando continuamente las hojas de las plantas. Esta plaga actúa en horas nocturnas en su fase adulta, aunque las orugas desarrollan su actividad a cualquier hora del día. Los tipos de cosecha más afectados por la Plusia suelen ser la cebolla, pimiento, habas, patata, remolacha, alfalfa, hierbas aromáticas como la albahaca, menta, etc. Cuando afecta a la planta del tomate, si no se pone solución a tiempo, la Plusia atacará los frutos.

Las orugas más pequeñas toman su alimento de la sustancia de hojas y tallos llamada parénquima. Cuando es adulta, la Plusia es más voraz y su comedura puede atravesar la hoja en su totalidad, originando la defoliación de las plantaciones, sobre todo si son jóvenes.

¿Cómo combatir la Plusia?

La primera medida a adoptar será el control visual de la plantación, eliminando todas las larvas que se localicen. Estas larvas estarán situadas generalmente bajo las hojas, e incluso en su interior. Si el proceso está avanzado y se ha producido la invasión de las hojas, hay que proceder a recortarlas, en parte, o la hoja completa si la plaga se ha extendido demasiado.

También puede utilizarse un plaguicida natural (nicotina, pimienta molida, etc.), así como diferentes productos fitosanitarios autorizados. Lo ideal es efectuar la pulverización cuando las orugas son todavía pequeñas, antes de que el efecto dañino se haya producido.

Medidas eficaces contra la Plusia

  • En el caso de los invernaderos, es muy positiva la colocación de mallas y redes en las aberturas de la cubierta, puertas, laterales, etc., y controlar su estado para evitar el deterioro y la penetración de las plagas.
  • Suprimir la maleza que rodea la plantación, y los restos de cosechas anteriores, que podrán servir como criadero de la plaga.
  • El material utilizado tiene que proceder de viveros autorizados, con la documentación adecuada.
  • Es importante proteger los primeros estadios del proceso vital de las plantas.
  • En caso de plagas agresivas, será necesario eliminar las hojas de la parte baja de las plantas, que suelen ser las más afectadas, retirando y destruyendo los frutos dañados.
  • Las trampas de luz y las denominadas de feromonas constituyen una gran ayuda para detectar vuelos de insectos en su fase adulta.
  • Es positiva la rotación de los cultivos, para que el terreno se limpie de la plaga, así como esperar un tiempo prudencial antes de realizar una plantación nueva.
  • En cuanto a los abonos, tienen que realizarse de manera equilibrada y sin excesos de abonos que sean nitrogenados. Si el abono que se utiliza es de origen natural, como es el caso del estiércol, es importante que esté limpio, sin plagas integradas.
  • Como hemos visto, en plantas pequeñas hay que intervenir en la fase visual de detección de huevos, larvas, los primeros daños, etc. En las siguientes fases, lo recomendable es intervenir a partir de un 2% de la aparición de las plagas.

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